Proyecto R.I.P

Las siglas R.I.P. hacen referencia a las tres fases del proceso indagación-acción: Representación, Interpretación y Presentación. Pues bien, lo que los profesores querían que consiguiéramos con este proyecto era la posibilidad de intentificar y reconstruir cualquier obra de arte desde puntos de vista personales.
Para ello, fue preciso "representar" el original desde un enfoque único y personal que permitiera una "interpretación" visual y conceptual de la obra, dedicando una especial atención a los procesos de reconstrucción de la imagen-obra de referencia y planteando una puesta en escena de aquellos elementos formales y conceptuales que nos resulten más destacables del original, proponiendo una nueva "presentación" del discurso original que evidencien la existencia de una reflexivilidad referencial.
Después de buscar y buscar obras, pinturas, autores, épocas de explendor... para descubrir alguna imagen que llevar a cabo en mi R.I.P, pensé en buscar a partir de algo que, personalmente me encanta y que es muy de  nuestra tierra, el flamenco. Así fue como me encontré con Ferran Codoñer, el autor de mi obra "Espalda flamenca". Ferran es un artista visual contemporáneo nacido en 1960 del que he podido encontrar poca información sobre su biografía. La obra que he elegido de este artista ha sido un óleo sobre papel. Representa a una mujer, morena de piel, que está sentada de espalda sobre un taburete. Sólo lleva puesto un magnífico mantón rojo que le cae desde las caderas estratégicamente colocado hasta el suelo y en los pies unos zapatos de baile. Tiene los brazos levantados hacia arriba cruzándose encima de su cabeza y las manos con las palmas hacia adentro que dan lugar a que los dedos adopten esa forma tan flamenca que transmiten fuerza y cierta gracia gitana. La curvatura de la espalda también es otro detalle a destacar.
                                                                                                                                                                 

Al principio me pareció una obra sencilla de representar dada su composición únicamente personal, la posición de la espalda erguida y manos y los elementos, mantón y zapatos, de los cuales disponia.

He de reconocer que no fue nada fácil realizar esta fotografía por diversos factores como son el que yo no me viera a mi misma para corregir la postura y mi madre, encargada de realizar la foto, tampoco es que tenga grandes dotes fotográficas entonces no realizaba bien el encuadre de la foto y tuvimos que repetirlo mil veces hasta que en la última foto, más o menos, conseguimos plasmar el original.